Friday, November 16, 2012

Adolece que no es poco

Dejame contarte algo
Sí, a vos bestia de fauces 
Y dientes kilométricos
Que danzás y a veces tropezás.
Dejame contarte 
Que te amaba.
Que gritaba: haceme tuya. 

Hubiera sacrificado animales por vos
Arriba del altar 
Con fotos y discos y tu remera
Que me miraban con ansias
Como yo te miraba con ansias
Y todas las noches
En rezo, decía: 
Deja, diosito, que sea mío.
Que me mire a mí
Que deje a su novia, la modelo
Tilinga rubia de cuerpo-espiga
Y que se busque una intelectual
Simpática, gordita,
Así se rompe un toque con el estereotipo.
Y seguí rezando hasta quedar con el cuello torcido
En sueños de crema de frutillas.
Tan exótico me parecías,
Así con tu bronceado
Tu pelo engominado
Tu traje sastre
Y sí, tu chivo, tan sexy
Sudabas talento
Tu voz una maraña 
En la que me quería enredar.

Mi vieja: apagá esa mierda.
Yo: ay, no, dejame un rato más.
Sólo, sólo un ratitito más. 
Mi vieja: mirá que te corto el cable
El VHS desgastado de ver siempre el mismo tema
El chavón tan desgastado que estaba en sepia
Con rayitas blancas, puntos pixelados
Mis ojos dos pelotas de tanto mirarte.
Sí, mirarte. Vos pegado en el techo, en las paredes en la puerta
Anverso y reverso
Mi viejo: podés hacer que el pelotudo ese no me mire
Y yo: ay, pa, no entendés nada.

La ansia adolescente 
De maravillarse con cualquier cosa
La entendía, pero vos, vos 
Vos eras distinto. 

Distinción y glamur
Obvio, yo como tarada detrás.
Y ahora, tarada aún pero más vieja
Más ¿sabia?
Te veo tambalearte sobre la tarima
Viejo y despampanante 
Como vedette descuajeringada
No sé si es por la frula que te movés así.
Tu pelvis se mece
Las tangas furiosas caen como papel picado sobre el escenario
Y cantás siempre lo mismo
Tu tour grandes éxitos ya hace quince años
Pero igual tenés arrastre
Y en coro gritamos: ¡¡¡LuisMi!!! ¡¡¡¡Te adoramos!!!!